domingo, 30 de mayo de 2021

Hombre bajo la lluvia

La gata salta a su regazo, la acaricia, realmente disfrutaba cuando arqueaba el lomo y soltaba esos dulces ronroneos.

¿Le temes a enamorarte?

El enésimo intento de dejar la drogas legales y algunas ilegales.

Misi, misi, misi, come on, kitten.

Había perdido el toque con los pinceles, con la escritura, con la lectura, con la fotografía. Escoge izquierda o derecha. Intercaló, apostando a que algo tenía que revelarle el tarot. Sonrío pensando en la Mona Lisa.

El más joven podría hacer que te enamores, la lujuria y el deseo están en ese camino, perseverancia y mejorar la comunicación. Se asustó como todas las veces que creía haber contraído el virus del covid19. Al otro lado, está el rey de copas; busca sentirse halagado pero no entrega su corazón. Además, tiene un secreto el cual podría ser un hijo, una mujer del pasado..., no sé, ve con cuidado, y se siente limitado por tí.

Descargaba la última película que le habían compartido. El chicle ya perdía su sabor. El café más cargado que de costumbre.

¿Cuál será ese secreto? -Hola, me podrías invitar a una copa. Mejor salgamos del tedio, vayámonos de viaje. Colgó el teléfono y se echó a dormir, está vez no le interesaba contemplar el atardecer.

Un hombre riendo -aplastado ante la iglesia- miraba la plaza y volvía a reír, los cartones esparcidos no le servirían ante la lluvia, ni la noche que caía lentamente. Sintió compasión, no de ese hombre, solo sintió compasión. Llamó por teléfono, no respondieron, tampoco insistió. Se paró al costado de ese hombre por varios minutos, sacó unas monedas de su bolsillo y se las dio. Las carcajadas aumentaron.


 

sábado, 22 de mayo de 2021

Luna llena

No encontraba el fósforo, mi frustración aumentó. Me asomé a la ventana, este pueblo duerme temprano. Cogí el encendedor -maldita sea no daba ni un chispazo-y lo tiré con tal fuerza que explotó, sonreí y la perra ladró. Cállate!

El teléfono empieza a sonar. Hola, tengo inconvenientes, no encuentro ni la navaja ni la linterna mucho menos fósforos. Alisto la correa de la perra y pongo los caramelos ácidos en la mochila.  

Besa mi mano mientras me mira profundamente suelta una media sonrisa. La perra se le abalanza le lame la cara y no deja de saltar.  Me muestra el tenue fuego que se divisa a lo lejos. ¿En cuanto tiempo llegaremos? Un par de horas a lo mucho, no tenemos prisa. 

Me pasa su cigarrillo, doy un par de caladas. Necesito mear. Escucho sonidos; respiraciones, deslizamientos, aves chillando. Veo su espalda esbelta, su cabello abundante,  su cintura estrecha y sus dedos delgados  y largos que juegan con una cuchilla.  

Sabías que debajo de estos pinos están enterrados los desaparecidos. Sus ojos posan en los míos, retándonos, ninguno baja  la mirada, da un par de caladas y sonríe. Nunca me han gustado los eucaliptos me recuerdan mi egoísmo. ¿Alguna vez, has podido entregar tu corazón?

Unos minutos antes de conocernos, fui testigo de un atropello, un hombre estrellado contra el pavimento, la sangre formaba figuras extrañas, todos paralizados y murmurando. Podía sentir el terror  de los otros reflejados en ese cuerpo inerte. Cuánta fragilidad, Dios. Crash, una botella de vidrio estrellada. Voltee y chocamos las miradas. 

¿A las personas les gusta amar o ser amadas? No lo sé, es mucha responsabilidad ambas situaciones, desde luego que existe alguna satisfacción en ello. Había pasado la hora del almuerzo, no teníamos hambre. Parecíamos ceniceros, olor a nicotina. Sacó de su bolsillo una navaja y se hizo un pequeño corte en su dedo índice. Prueba mi sangre, de repente te agrade su sabor. Chupe su dedo.

Mira, están ahí cocinando la carne. En un par de horas se habrán emborrachado y aún no habrá caído la luna llena.  Le doy un par de caramelos y enciende otro cigarrillo. 

El fuego se extingue, las parejas se van a sus carpas, se apagan las luces. Nuestros corazones excitados se concentran en cada minuto que sucede. 

Me coge el cuello con sus manos heladas. Susurra; no escucho sus gritos, será que  huyeron esas bestias cobardes. Quizás la naturaleza manipulada no esta a nuestro favor, mierda.

¡Enciende la cámara! La luna llena empieza a caer. Arcadas y bramidos.


 

miércoles, 19 de mayo de 2021

grito

tercera taza de café y aun no es medio día

dar vueltas en el mismo lugar

te extraño a gritos, me pesas

 

calor inesperado que cae 

frio que empieza en los pies

te extraño a gritos, me ardes

 

me abrazo a la almohada

me acerco a tu recuerdo

te extraño a gritos, me odio

 

 

 

 

 

miércoles, 5 de mayo de 2021

Crónica de una queer anunciada/ no me hagan caso estoy ebria. Fin!

 A pocos minutos de la media noche, o la hora cero, con cuatro latas de chelas -las más baratas como siempre- encima, después de haber visto el cielo estrellado desde este cuarto piso, haberme atragantado de una bolsa de tortis picantes y haberme conmovido por  el cover de "eres", sí, supongo que estoy a pocos días de menstruar o lo que chucha sea, últimamente lloro de forma tan patética que hasta me doy pena...anoche lloré escuchando la flor de retama, intenté cantarlo pero se me quebraba la voz y las lágrimas a chorros, ya me estoy desviando del tema...y no estoy ebria (aún, no hasta terminar el six pack, horror!), solo soy una patética envuelta en una halo de agresividad, ya, más patético aún pero es lo que hay varón, varona, ja!

Quiero repasar lo siguiente,  tengo un gran parecido con mi padre; cejas, ojos, pómulos, quijada, de mi madre la nariz y la sonrisa -de sana-, bien, cuando cree éste blog, pensé que había encontrado un término que me defina;queer, debido a que me era difícil definirme enteramente como lo que se conoce socialmente como "mujer", sí, tengo ovarios, menstruo y tengo tetas -no son grandes y qué chucha, no-, en este cuerpo de 151 cm, con una estructura difusa, ya, no pues, no tengo el cuerpo reloj de arena.

La primera persona que se enamoró de mi era un chico que a la fecha es es gay  tal vez chica trans...no lo sé, maldita sea, han pasado 5 latas de cerveza, y ya son las 12:22 del día 5/5/2021, si sumamos las últimas cifras dan cinco! Como la estrella de David. 

Cesar N, me ha preguntado si soy una chica trans, rayos! No supe cómo reaccionar, chica trans? RCSM! Me ha confesado que mayormente es heterosexual, pero que no tiene problemas de ser moderno (imagine que en realidad le da pena estar recibiendo pene sin ser catalogado de homosexual), ja! Para coronar el pastel, le gusta las chicas trans y que luzco rica, ptmr, ja! No sé cómo chucha sentirme.

Por otro lado, mi madre ha vomitado, tengo miedo que sea covid19. No hay tiempo para pensar en el duelo, estamos en una ruleta rusa, cualquiera podría morir, sin embargo, mantengo la esperanza de que no me va a tocar a mi  la bala de gracia, me gusta vivir...

Agregar, que todas estas lineas se están escribiendo en una situación de alcoholismo y de pandemia y una luz de esperanza que se ha abierto por el amor. Maldita sea, el amor traspasa la transexualidad, la enfermedad y el azar...mi corazón está dividido en tantas personas. Quiero ofrecerme como su alimento aunque suene pretencioso, los amo ( te amo i, a, m, d, y l).

Me iré a dormir y subiré el trabajo de la persona que ocupa gran parte de mi corazón, no sé por qué, pero es así.



domingo, 2 de mayo de 2021

Apuntes sobre los sueños develados; my love life

Bajando -a recoger las piedras del cual hablaba y apreciaba el maestro- al riachuelo de agua transparente, mis pies descalzos, mi ropa ligera, me distraje y me aleje del grupo, subí a la orilla.

Me encontré con hermosos animales; polluelos de aves exóticas, peces de colores, gatos amarillos con manchas lilas y en eso pareces tú, suave y grácil, empezamos a apreciar mutuamente aquella pintura, tu cercanía que mece el cuerpo, la congela y la vuelve a calentar.

Intentas acorralarme entre tus brazos, me escabullo, jugamos al juego de la seducción. tus ojos entre los míos con un distancia que acelera el corazón.

Mi curiosidad me lleva a explorar, desciendo, chicos sentados haciendo música, una anciana al borde del rio peinando su cabello, rayos de sol que iluminan el lugar con tonos verdes y celestes, hay un otro ahí, quien me ofrece galletas de vainilla cubiertas en chocolate, disfruto tanto su sabor, sonreímos,  decidimos sentarnos, se acercan dos  mujeres blancas obesas, parecían gemelas, se sientan a nuestro costado.

Subo como siguiendo un juego de las escondidas, pienso en una excusa, tengo tres botellas de agua en mi mano, te veo a cierta distancia, ligeramente confundido y compungido...no sé qué sentir, evito voltear atrás con la esperanza que vienen tras de mi.

Me desvanezco entre la luz, mi último pensamiento es confusión; se puede amar a dos personas al mismo tiempo?