martes, 30 de diciembre de 2014

Piel de serpiente

Habitamos aprendiendo a agredirnos
a veces tu, yo o los dos al mismo tiempo
y otras  el tiempo y las circunstancias

Mientras veía en tus ojos reteniendo las lagrimas
te susurraba, repite conmigo
"así como las serpientes se toman su tiempo para dejar su cuerpo en escamas
yo también puedo dejar los recuerdos pasados para correr por el bosque"

A ella se le escapo una lágrima, que se seco con el fuego de su resentimiento
-tenias que estar muy atento para haberla visto caer-

Sonidos de  xilofono como fondo
risas infantiles de dos niños
revoloteando al rededor de los juguetes


Respondes, son tantos años, tantos golpes, quisiera salvarla-me de todo esto
-bajas la mirada, cierras el puño y tus ojos encendidos liberan la lágrima-

Ella dirige su mirada hacia la izquierda
suelta un grito y nos rompe los tímpanos
los niños tocan la puerta
inquietos de saber que se ha quebrado en este mundo

Las serpientes se han liberado de sus escamas
dejando su otra piel en el camino que ya no les pertenece
las recogeremos para hacer alguna pócima con ellas